La Rioja, situada en el norte de España, es una región vinícola que destila historia y tradición en cada copa. Sus viñedos, que se extienden a lo largo del río Ebro, han sido cultivados desde la época romana. Sin embargo, fue en el siglo XIX cuando la región dio un salto cualitativo, adoptando técnicas de vinificación de Bordeaux tras la devastación causada por la filoxera en Francia. Esta simbiosis franco-española sentó las bases de la fama mundial de los vinos de La Rioja, conocidos por su calidad y longevidad.
El clima de La Rioja combina influencias atlánticas y mediterráneas, protegido por las montañas Cantábricas, los suelos, que van de calcáreos y arcillosos a aluviales y ferrosos, añaden complejidad a los vinos, se divide en tres subregiones principales: Rioja Alta, Rioja Alavesa y Rioja Oriental (anteriormente Rioja Baja). Cada una aporta características únicas a los vinos debido a sus microclimas y tipos de suelo diversos.
Rioja Alta, con su clima fresco y suelos arcillosos calcáreos, produce vinos elegantes y longevos, con acidez marcada y sabores complejos.
Rioja Alavesa, al norte del Ebro, tiene suelos calcáreos y aire fresco del Golfo de Vizcaya, originando vinos finos y estructurados, especialmente Tempranillos equilibrados y profundos.
Rioja Oriental, con un clima cálido y suelos variados, produce vinos robustos y frutales, destacando la Garnacha con perfiles afrutados y con cuerpo.
Aunque Rioja es sinónimo de vinos tintos, especialmente de Tempranillo, la región también produce excelentes blancos, rosados y espumosos. Los tintos se clasifican según su envejecimiento:
Joven: Vinos frescos y afrutados, generalmente sin envejecimiento en barrica.
Crianza: Requieren al menos un año en barrica y otro en botella, ofreciendo sabores equilibrados de fruta y madera.
Reserva: Envejecidos tres años, con al menos uno en barrica, son vinos complejos y elegantes.
Gran Reserva: Con cinco años de envejecimiento (dos en barrica), son vinos excepcionales, ricos en matices y con un gran potencial de guarda.
En los últimos años, Rioja ha visto una ola de innovación con bodegas modernas que están redefiniendo el panorama vinícola. Desde técnicas de vinificación sostenible hasta la introducción de variedades internacionales como Chardonnay y Sauvignon Blanc. Entre ellas destacamos bodegas Mazuela que destaca por sus vinos frescos y llenos de carácter. Rioja continúa evolucionando mientras honra sus raíces.
La Rioja no es solo una región vinícola; es una experiencia sensorial que combina historia, paisaje y pasión en cada botella. En Vinnatura, nos enorgullece ofrecer una selección de estos vinos excepcionales, perfectos para cualquier ocasión y paladar. ¡Salud!